Hugo Enrique Almonacid Díaz
Calbuco, Los Lagos

Hugo Enrique Almonacid Díaz nació el año 1989 en la comuna de Calbuco, Región de Los Lagos. Creció y se desarrollo en una familia estrechamente vinculada a la carpintería de ribera, empezando por su bisabuelo que construyó embarcaciones con el principal objetivo de poder transportarse y movilizar productos como papas, pescados y mariscos que comercializaría en Puerto Montt y así adquirir provisiones esenciales como la harina, pasando por su abuelo que elaboró lanchas y botes también frente a la necesidad de conectividad: “yo creo que la mayoría de las personas ahí, en ese tiempo, hacían sus propias embarcaciones, por necesidad de salir de ahí. De vender sus productos. De sustentarse más que nada. De trasladarse”. Hasta llegar a su padre quien se desempeña aún como carpintero de ribera, que trabajó tanto en las cercanía de su vivienda como en astilleros de otras zonas, llegando incluso a Coronel, donde Hugo y su familia estuvieron viviendo alrededor de cinco años.

Así también cuando su padre no tenía mucha demanda por construcción de embarcaciones en Calbuco, se iba hacia el astillero de un maestro carpintero en Lebu donde se desempeña por una temporada. 

De tal forma, Hugo a temprana edad estuvo en contacto con la madera y la carpintería, observado de pequeño el trabajo que realizaba su padre, primero jugando y luego ayudando en el proceso de construcción: “De agarrar herramientas, empezar a trabajar con madera. Ver que madera es como más versátil de trabajar, lo más fácil”. Hugo estudió su educación media en la ciudad de Puerto Montt, por lo cual cuando regresaba a su casa en Calbuco, durante las vacaciones, ayudaba a su padre en los pedidos de embarcaciones que tenía, de modo tal que siempre estuvo inserto en el rubro de la carpintería, era normal acompañar y ayudar a su padre en aquellas labores. Al egresar de cuarto medio, Hugo tuvo que decidir qué estudiaría en universidad, sin embargo, decidió quedarse un año trabajando con su padre para aclarar sus ideas, es en ese escenario que decidió ingresar a la carrera de Ingeniería Naval, Mención en Arquitectura Naval en Valdivia, ciudad a la cual ya había ido en ocasión anterior acompañando a su padre en la construcción de una embarcación. 

La formación universitaria el entregó herramientas, si bien más ligadas a la construcción con materiales como el acero, fibra o aluminio, para observar de manera más crítica y técnica los procesos de elaboración de una embarcación, sin embargo, valorizando los conocimientos y experiencia de los maestros carpinteros de ribera como su padre. De tal forma evidencia la existencia de prácticas y diseños de construcción que son propios de la zona: “Acá igual es bien marcado el tema del diseño. Cada sector, y a veces en cada sector, cada persona tiene un diseño que él fue ganando con experiencia y ese es su diseño”. 

En el proceso de construcción Hugo ha trabajado mediante la técnica de cuadernas natural, es decir, utilizan piezas de madera con formas particulares que después unen mediante pernos para tener las partes estructurales de la embarcación, a diferencia de otras zonas donde se utiliza el mecanismo de coser la madera a vapor. En términos de madera, recuerda que antes se utilizaba ampliamente árboles como el Ciprés y Coigüe, debido a la firmeza que otorgan a la embarcación. El Ciprés en partes como tablas, forro y casco; mientas el Coigüe era utilizado en la quilla. En la actualidad el acceso es cada vez más difícil, teniendo que comprar madera en ciudades como Valdivia e incluso Temuco, lo cual, además incrementa su costo, razón por la cual se ha optado por la utilización otras maderas como la de Eucalipto. 

En relación a su jornada de trabajo, Hugo compatibiliza la carpintería de ribera que realiza junto a su padre, con su desarrollo como ingeniero naval. De forma tal que para la construcción de una embarcación la jornada depende principalmente de la temporada y de las condiciones climáticas, es decir, durante el verano por la disponibilidad de luz es mayor por lo cual para aprovecharla, pueden trabajar hasta las 21:00 horas; mientras en invierno, como se oscurece muy temprano la jornada llega hasta las cinco de la tarde. Por su lado, el tiempo también determina la jornada de Hugo y su padre, ya que durante periodos de lluvia intensa no se trabaja en el exterior, por lo general se realizan labores del interior de la embarcación o se espera a que las condiciones mejoren para poder continuar con el proceso. 

En la actualidad, Hugo y su padre han observado que la carpintería de ribera como oficio se estaba debilitando por lo cual tuvieron la iniciativa de llamar y agrupar a los carpinteros de la zona a reunirse en una asociación de carpinteros de ribera, la cual se encuentra integrada tanto por antiguos maestros como los más jóvenes, lo que “igual le da como una motivación de que sí se puede hacer este oficio más conocido. Que la gente lo conozca. Y que sea un oficio importante igual”. De forma tal que han podido reunirse no tan sólo entre ellos, sino también con autoridades locales, permitiendo plantear problemáticas como la disponibilidad de un espacio particular en la playa destinado a la utilización de los carpinteros en la construcción de embarcaciones. Es así como la conformación de esta agrupación ha permitido por un lado, visibilizar aquellas dificultades que enfrenta el oficio, como también para potenciar y proyectar hacia el futuro el desarrollo de la carpintería de ribera.

Hugo Almonacid se encuentra activo en el ejercicio del oficio, apoyando a su padre en la construcción de embarcaciones y participando de la agrupación de carpinteros de ribera de Calbuco.

  • Identificador SIGPA: CI3367
  • Fecha de registro: 28-08-2019
  • Tipo: Cultor individual
  • Género: Masculino
  • Comuna: Calbuco
  • Region: Los Lagos
Ubicacion