Gonzalo Padilla comenzó a trabajar a los 16 años en la fabricación de lanchas junto a su padre, el ex minero del carbón y maestro de ribera Jilalbar Padilla. Gonzalo se desempeñó como ayudante de su padre por más de 5 años, luego de aprender sobre la construcción de embarcaciones, adquirió conocimientos externos para incorporar materiales compuestos como la resina y la fibra de vidrio a su trabajo para formar capas de plástico reforzado, su principal función actualmente, consiste en aplicar estos materiales a los cascos de embarcaciones construidas en el astillero.