María Santina Apablaza Gallardo es locera del sector de Pilén Alto. En el marco de la investigación realizada entre 2018 y 2019, se extraen sus citas biográficas sobre su historia como locera. “Tendría unos 14 años, 13 años por ahí, yo aprendí donde vi a mi mami hacer allá, yo iba aprendiendo a hacer sola, porque ella aprendió a hacer sola, primero cositas chicas y después más grandes. Yo me acuerdo de que empecé un día domingo a hacerla, lo primero que me hice fue una gallinita así, lo primero, le hice la fuente y después la tapa altiro y hay que hacer la fuente primero y después la tapa y yo la hice junta, la primera no quedó muy buena, pero ya se fue haciendo con más calma. Sí, le ayudábamos a hacerla a mi mamá (Bernarda Gallardo), a arreglarle un poco así. No le he enseñado a otras personas, que el tiempo no me da y si tuviera tiempo, salir para partes lejos y uno no tiene como salir, no se puede. Yo creo que sí hay que ser generoso con el conocimiento, para que sigan después, porque después las que estamos, ya no vamos a estar para seguir haciendo. Yo creo que es importante, porque hago mis cosas y las vendo y me resulta, recibo mi plata. Sí, que yo empecé a trabajar y este es mi trabajo y sigo en él, no he trabajado en ninguna cosa más desde que salí de la escuela, me metí a esto y ahí sigo”.
María Santina no participa de agrupación alguna, ni ha enseñado el oficio. Se desempeña como reproductora del oficio, como parte de una tradición familiar, llevada a cabo por sus antepasados y actualmente, por su madre y sus hermanas.
Loceras de Pilén reconocidas Tesoro Humano Vivo 2012.