Marta Parra Lincopán nació en 1942, es una mujer mapuche especialista en tradiciones orales de su pueblo. Pertenece a la Comunidad Mapuche Llamuco Bajo de la comuna de Vilcún en la región de La Araucanía.
Sus conocimientos abarcan las diversas formas de transmisión de historias mapuches, dentro de las que destacan los epew (cuentos de animales), ngütram (conversaciones históricas), piam (narraciones míticas) y ülkantun (canciones). Estas son narradas en un contexto cotidiano principalmente a nivel familiar, aunque también se socializan entre la comunidad, sobre todo cuando los vecinos invitan a las personas para rememorar dichas historias. Son muy pocas las personas que en la actualidad manejan estos saberes, por lo que se consideran en peligro de desaparecer. Marta Parra, además de tener dominio de dichas tradiciones orales, lo hace a través de su propia lengua originaria, de forma muy fluida y con entonaciones propias que requiere el acto de contar y cantar estas tradiciones orales. Esta lengua también ha sufrido modificaciones, cambios de estilos, entre otros, que esta cultora ha sabido mantener.
Desde hace muchos años ha colaborado en la difusión de estos conocimientos por diversos medios, destacando artículos en revistas y libros. Dentro de estos destaca la narración "Explosión de la Casa", compilada por Desiderio Catriquir y Teresa Durán; "La casa donde habita el Sol, la Luna, el Lucero y el Cherrufe" en el libro La Tierra del Cielo de Sonia Montecino; "Kushe papai ñi ruka" en el libro Wenumapu: “Astronomía y Cosmología Mapuche” de Gabriel Pozo y Margarita Canio; y su obra más importante, el libro “Ayekan Zungu: kiñeke ngütram ayiwtupiwkeal”, de su autoría, que incluye un CD de audio con las grabaciones de las tradiciones orales.
Todo este conocimiento lo ha transmitido a nivel familiar, comunitario y también realizando clases como educadora tradicional para las carreras de Antropología y Arqueología en la Universidad Católica de Temuco. Es destacable su paciencia y amor con la que enseña.
Se debe destacar que estos conocimientos tienen como fuente las historias que escuchó de sus abuelos. En sus propias palabras expresa que: