Hay muy pocas organizaciones de canto a lo divino, parece que son como 3 o 4 nomás po.
Yo creo que tienen que seguir el ejemplo, organizándose, aquí mismo en San Antonio, después de nosotros se hizo la agrupación frutos de Chile, entonces, que bonito estar organizado en esta tradición que es el Canto a lo Divino.
Organizado se logra más apoyo, porque un cantor de por ahí está suelto, no tiene apoyo de nadie, va para donde no sabe si lo reciban o no, en cambio organizado, va la organización, eso lleva un valor. Por mi, ojala hubiera en todas partes organizaciones de Canto a lo Divino.
Acá la primera organización fue esta, fuimos ejemplo para el otro lado. Los cantores de aquí siempre se juntaban, iban cada uno por su lado a cantar y como siempre iban los mismos y de ahí un día decidimos hacer un grupo de esto y hacer una organización, y ahí se empezaron a hacer tramites, se le puso el nombre a la agrupación. Así el cantor se va haciendo responsable, tiene su organización, entonces se ve más responsable, no como uno solo. Así se va haciendo caminar esto, organizado es muy bonito, por eso nosotros hacemos reuniones.
Yo recuerdo que cuando empezamos esta agrupación conversamos con don Isidro Piña, que fue una de las personas que inició la agrupación. Y llegamos a la conclusión de que así como a mi me gustaba, habían otras personas que les gustaba y no sabían hacerlo, entonces me decía que habían muchos cantores que estaban ahí, que no cantan, se han dejado, porque no tienen donde ir a cantar…. Y conversamos con la gente y decidimos juntarnos, llegamos a la conclusión que era mejor juntarnos y reunirnos para que salgamos juntos. Para que no nos saliera tan caro todo, quisimos hacer un beneficio, y ahí hicimos el grupo, una institución, porque tuvimos que sacar el rol, personalidad jurídica, todos los reglamentos. Y un día nos juntamos y formamos la agrupación, un dia 19 de Diciembre del 2002. Se juntaron como 30 viejos. Invitamos a una reunión, se dijo de que se trataba y todos firmamos. Y ahora se nos han ido unos cuantos, pero los que vamos quedando estamos acá. Hoy somos como 18, pero se han muerto varios. Ahora hay más socios que cantores, pero también van a las novenas, acompañan siempre.
Para Julio se hace la novena del Carmen, para julio, se hace en la casa de don Gonzalo Farías y a la semana siguiente en la de otra socia. Vamos todos para allá y después todos para acá. Siempre día sábado.
Nosotros ya somos una institución y podemos postular a los proyectos. Hemos hecho proyectos, encuentros de payadores. Pero después lo dejamos a un lado y lo hace la municipalidad. Don Arnoldo (Madariaga) también hacía talleres aquí.
La agrupación de Canto a lo Divino se rige más bien por el calendario religioso, el calendario religioso nos va fijando las fechas con las cuales el Cantor a lo Divino está actuando.
Esto tiene una raigambre muy grande, tiene toda una tradición, es una tradición muy antigua, asi que sería bueno que se rescate.
En la agrupación no hay participantes jóvenes, y de hecho se van acabando los cantores mayores y se va achicando la agrupación, porque se va acabando la gente y no hay gente joven que se interese. Entonces yo pienso que este grupo va a desaparecer, hace falta enseñar a la juventud. Mis sobrinos antes cantaban, pero después van creciendo y se alejan.
Un problema es que esto se hace a lo lejos, entonces si se hiciera más seguido, a lo mejor se interesarían e irían.
En los colegios sería bueno hacer talleres, porque imagínese cuando se acaben los cantores.
El mayor problema es competir con la tecnología, los niños andan todo el día con el teléfono.
El niñito de Rogelio antes cantaba a lo divino, y ahora canta pura música tropical, se cambió. Y cantaba tan lindo.