Don Sergio Valdivia, quien ha sido arriero desde los doce años, aprendió la práctica de composición y canto de versos en décimas encuartetadas a lo Divino y a lo Humano, de su padrino, don Gilberto Acevedo, cantor de Chimbarongo, y en su vida ha ido desempeñando su rol de cantor, acompañando velorios, fiestas, etc. Hay que señalar que es el único cantor a lo Divino y a lo Humano de la comuna de Malloa.