Inició su trabajo en la alfarería a los quince años, aprendiendo el oficio de su tía materna Teresa Figueroa, desarrolló ésta actividad durante 13 años. dominó y practicó todos los pasos de la alfarería, a excepción del molido, su trabajo estaba enfocado en la elaboración de piezas ornamentales (Miniaturas), actualmente se encuentra inactiva.
Tesoro Humano Vivo 2019 Alfareras de Quinchamalí y Santa Cruz de Cuca